Pero lo más insólito es que Paraguay está en la final sin haber ganado un sólo partido en toda la Copa América, claro tampoco ha perdido, pues todos los ha empatado y solamente gracias a la definición en penales logró eliminar a Brasil en cuartos de final y hoy a Venezuela en semifinales, en ambos partidos siendo superado futbolísticamente por su rival y sólo gracias a su portero Justo Villar que ha estado impresionante y también a la suerte es que salió adelante.
Porque esa fama de que la defensa paraguaya es de las mejores y que en base a ello han logrado anular el potencial ofensivo de sus rivales, en esta Copa ha sido sólo eso, fama, como el dicho de "crea fama y héchate a dormir", porque Paraguay no ha defendido nada bien y casi de milagro es como han llegado a la final, donde además de Justo Villar, los postes y el travesaño han estado de su lado.
Y por otro lado está Uruguay, que si bien sí ha ganado y para muchos es el gran equipo de esta Copa, para mi deja mucho que desear, es un equipo que practica un futbol tosco, aburrido, insípido, deshabrido por decir lo menos. Si, tiene algunos buenos jugadores como Forlan que se cuece aparte, pero la mayoría son jugadores rudimentarios cuya mayor virtud es meter y meter, matarse en la cancha como se dice, por lo que para mi es una verdadera lástima que estos dos equipos estén en la final y que uno vaya a ser campeón. Y no porque tenga algo contra ellos, sino por su estilo de juego que yo definiría como "Deprimente".
Y es que Uruguay y Paraguay no defienden bien, sus porteros han tapado los errores y las carencias de unas defensivas que no son tan buenas como la prensa no para de decir. No son como Italia en sus buenos tiempos, que era el arte de la defensa y que era un espectáculo ver defendiendo, sino que su estilo de juego es soso, seco, aspero, sin sabor.
Si yo de niño hubiera crecido viendo futbol como el que practican Uruguay y Paraguay, hoy detestaría el futbol.
Y aclaro que no soy el típico que piensa que con Brasil y Argentina fuera ya nada vale la pena en la Copa América, no, yo no digo eso. Ya que pienso que si equipos como Venezuela, Colombia o Chile por ejemplo hubieran llegado a la final, sería un oasís refrescante entre tanto futbol deprimente, que sería muy agradable ver.
Pero bueno, las cosas son así. Pensaré seriamente si es que voy a ver la final el domingo, pues sinceramente de espectáculo no espero casi nada.
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