El Barcelona aplastó esta madrugada (de México) en Japón al Santos para coronarse campeón del Mundial de Clubes 2011 y reafirmar una vez más que es el mejor equipo del mundo y no hay quien le haga sombra.
El partido fué prácticamente un monólogo (como diría Adal Ramones "¿Quieren Monólogo?"), en donde el Barça no le prestaba el balón al Santos y nada más lo veían pasar de un lado a otro y hasta en cierta forma creo que después del 3-0 el Barça quitó el pie del acelerador y aunque siguió jugando bien, creo que ya no empujó con todo, no sé si por no querer humillar más al Santos con una goleada aún mayor o por cuidarse un poco de alguna posible lesión como ya le pasó a Villa en el partido de semifinales.
Y es que, que bárbaros, que manera de jugar, porque sólo hubo un equipo en la cancha y demostró con claridad la diferencia que hay entre uno y otro equipo, pues si ni el Madrid pudo hacer mucho hace una semana contra el Barça y en el mismo Santiago Bernabéu, poco se podía esperar del Santos.
La verdad creo que el Santos se debe ir, dígamos que satisfecho con ese 4-0 en contra, pues si el Barcelona hubiera querido le mete 6 ó 7.
No puedo imaginarme lo que debe estar sintiendo el Bayer Leverkusen (próximo rival del Barça en la Champions League) después de ver este tipo de exhibiciones del Barcelona.
Para mi este Barcelona es mejor que el del 2009 que también ganó el Mundial de Clubes y la Champions (y bueno, todo lo que disputó) y no veo cómo alguien pueda frenarlo, sencillamente juegan de forma superlativa.
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